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El té marroquí es una de las mezclas más populares en nuestro país y muy consumido en el norte de África. Desde el Siglo XIX que se popularizó el consumo de té verde y la decadencia del café entre los países Islámicos, se ha convertido en un ritual universal y seguramente el té más consumido por encima del famoso Earl Grey.
Muchas personas creen que es un té que se produce en Marruecos pero en realidad, es un té Chino de base al que se le añade hojas de menta fresca y 2 ó 3 cucharadas de azúcar.
La mayoría piensa que es un té propio de la cultura marroquí, de hecho si viajas a Marruecos es prácticamente imposible irse de allí sin beberlo una decena de veces. La verdad es que en muchas otras regiones encontramos el mismo té con diferentes matices como son:
Diferente variedad de té verde, piñones, agua de azahar… podemos decir que se trata de la misma esencia con diferentes elaboraciones.
Ingredientes:
La forma original es muy sencilla de elaborar. Hay que conseguir un té verde estilo Gunpowder, de hoja pequeña, que tenga un sabor intenso y limpio. Hacerlo con tés más complejos de China arruinaría la experiencia.
Ten en cuenta que le vamos a poner menta o hierbabuena fresca y queremos que nos quede un buen sabor de boca.
Menta fresca o Hierbabuena fresca.
Azúcar en grandes cantidades.
Utensilios / menaje:
Un par de vasos y una tetera típica árabe ( una bandeja no es obligatoria pero sí bastante recomendable)
Esta forma de preparación del té marroquí puede variar ligeramente entre aldeas, he tratado de juntar los elementos comunes entre todas las que he podido conocer.
Como puedes ver esto está a medio camino entre preparación y ritual / ceremonia.
Para nosotros puede ser una cantidad de azúcar bastante elevada así que eventualmente está bien tomarlo así, pero si piensas tomarlo cada día, mejor usa el método que te proponemos.
Ingredientes:
No hay mucho misterio y te aseguro que lo disfrutarás, Te recomendamos que uses nuestro té Marroquí. Es una mezcla propia que combina un Gunpowder de una calidad bastante buena con aroma natural de hierbabuena y hierbabuena seca natural.
El secreto del éxito de este té es precisamente la calidad de la hierbabuena que empleamos.
Agua caliente entre 70-80ºC
Hierbabuena fresca. No es obligatoria y si no la usas no pasa nada, pero el punto que le da poner una ramita fresca no tiene precio.
Azúcar si es que lo quieres endulzar. No es necesario porque si sigues las instrucciones el té no sabrá amargo, pero eso depende de tu gusto.
Utensilios:
Taza o tetera
Vasos
Mi consejo es que lo pruebes tal cual y te acostumbres al sabor. Ten en cuenta que cualquier cosa que añadas al té será “mala” si tomas demasiado. Beber una taza de té azucarado no te hará ningún mal, pero imagina que tomas 3 al día…
Como te comentaba encontrarás diferentes preparaciones como en túnez. Allí le añaden unos piñones frescos a la taza.
El pueblo saharaui lo hace con té Chun Mee en lugar de Gunpowder
Se puede hacer con Lavanda, rosas o cualquier otra hierba aromática tipo romero o tomillo.
En las formas más tradicionales se pone el azúcar entre los dientes mientras se bebe para que lo vaya disolviendo el té al pasar por la boca.
Consejo Final:
Si puedes, hazte con unos dulces árabes y la experiencia será total.
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